Chivas se instaló en las semifinales de la Copa Sudamericana, tras empatar ayer por la noche con River Plate 2-2, global 4-3, y enfrentará el 12 de noviembre en el partido de ida al Inter de Porto Alegre en el Estadio Jalisco; el de vuelta será una semana después en Brasil.

Las anotaciones por parte del “Rebaño” fueron obra de Marco Fabián y Alberto Medina, mientras que por River Plate, Radamel Falcao anotó los dos tantos.

Chivas salió a cuidar el gol de ventaja que se trajo del Estadio Monumental de Buenos Aires, pero los jugadores denotaron cierta confianza, la cual leyó muy bien River Plate, equipo que salió con determinación en busca del gol del empate.

Corría el minuto dos, apenas la afición tomaba su lugar, cuando Bonanotte envío centro a segundo poste, donde apareció preciso Gustavo Daniel Cabral, quien tocó suave y logró meter el esférico en medio de los pies del central Héctor Reynoso. El gol cayó como balde de agua fría.

Chivas estaba perdido, River lo metió contra su campo, el esquema táctico que ordenó el estratega Efraín Flores fue vulnerado cuantas veces quiso el rival, pues tuvo la posesión del balón y el mando territorial; los tapatíos no tenían claridad en sus salidas.

Al 20’, Falcao penetró a placer la defensa de Chivas por el sector derecho, entró al área chica, encaró al arquero Hernández y con tiro raso a la izquierda, anotó el segundo de River que sepultó el ánimo rojiblanco y convirtió el Estadio Jalisco en un velorio.

Al 40’, Abelairas cobró tiro libre en tres cuartos de cancha por el centro, su envío fue al área grande por el sector de la derecha, donde conectó de cabeza Falcao, el balón techó a Hernández, a quien la buena suerte le sonrió debido a que el esférico se estrelló en el poste derecho y el rebote le cayó a las manos.

Cuando el primer tiempo estaba por finalizar, el arquero Ojeda sujetó dentro área a Santana, en un claro penal cometido a favor del chiverío, que el central Roberto Silvera no sancionó.

Para la parte complementaría, Flores realizó movimientos, cambió la línea de cuatro defensas por lo habitual, lo que maneja el “Rebaño”, cinco; entró Alberto Medina por Édgar Solís, y Marco Fabián por Gonzalo Pineda. Chivas desde ese movimiento mostró una cara diferente, fue agresivo y abrió el campo.

Al 49’, Abréu conectó de cabeza un balón que fue directo al poste izquierdo de Hernández, el rebote le cayó al mismo “Loco”, pero éste tardó en disparar y cuando lo hizo, el cancerbero rojiblanco alcanzó a regresar y se quedó con el disparo.

Al 59’, Arellano ganó un balón en tres cuartos de cancha por el centro, lo acarreó unos metros hasta llegar al área grande, un rival salió por él, y Arellano bombeó el balón, el cual salió con ventaja para Marco Fabián, quien sacó disparó para vencer a Ojeda. Era el 1-2.

La euforia se desató en el Jalisco, porque Arellano de nueva cuenta al 63’ apareció con su velocidad, acarreó un balón desde tres cuartos de cancha por el centro, entrando al área metió pase a Medina, quien se plantó frente a Ojeda y lo fusiló con disparo de derecha para empatar el marcador 2-2; global a favor de Chivas 4-3.

En tiempo de reposición, River tuvo dos oportunidades claras de gol en los pies de Archubi y Bou, quienes con terrible técnica individual, colaboraron a la eliminación de su equipo.

Ambos técnicos, Efraín Flores y Diego Simeone fueron expulsados casi para finalizar el encuentro.

Chivas de Corazon

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