Fue una calca del partido del miércoles pasado, en la cancha del Estadio Jalisco. Pero en esta ocasión la victoria no estuvo del lado rojiblanco. Tres minutos fueron suficientes para vislumbrar, lo que a la postre fue el destino de las Chivas. Ante un repleto Estadio Andrés Quintana Roo, Atlante fue un vendaval durante los primeros 15 minutos del encuentro.
Giancarlo Maldonado al 3´ penetró en el área del Rebaño y con tiro cruzado abrió el marcador ante la alegría de la afición local y el desconcierto del Guadalajara, cuya anotación fue un auténtico balde de agua fría. Los Potros tomaron confianza y tomaban el balón, para de esa manera evitar que Chivas hiciera su futbol.
Conforme trascurrieron los minutos, los rojiblancos fueron equilibrando las acciones, hasta dominar al equipo dirigido por José Guadalupe Cruz y generar verdadero peligro sobre el marco defendido por un cada vez más exigido Federico Vilar.
Al 15` de acción, la ofensiva de Chivas despertó y Sergio Santana envió un servicio que fue rematado por Sergio Ávila que se fue apenas por encima de la portería atlantista. El Guadalajara ya estaba por superar al Atlante en el trámite del partido.
Ramón Morales a punto estuvo de marcar el empate, pero el balón pegó en el travesaño ante la mirada angustiosa de Vilar. Era el 21´ Chivas ya era mejor en el partido.
Corría el 39´ cuando un tiro libre cobrado por Sergio Ávila pasa en medio de un mar de piernas, incluidas las manos de Federico Vilar a quien se le escurre el esférico que termina en el fondo de la portería del Atlante, pero la anotación es invalidada por Armando Archundia, árbitro central del partido por fuera de lugar.
Pese a la adversidad, Chivas no bajó los brazos y para la segunda mitad del encuentro mantuvo el dominio con llegadas de Alberto Medina y Omar Bravo. Fue precisamente una jugada de Bravo dentro del área azulgrana la que pintó la duda en el trabajo de Archundia. El de Los Mochis fue jalado en el área por Omar Castillo, pero el silbante dejó seguir la jugada. El recuerdo del penal rojiblanco en el Jalisco, rondó el Andrés Quintana Roo en ese momento.
Atlante también tuvo sus opciones para ampliar el marcador, pero Luis Michel y la defensa de Chivas, estuvieron atentos ante los embates del Potro que pese a lo esporádico de sus arribos, no dejaron de traer peligro.
Xavier Báez, a punto estuvo de hacer la diferencia mediante un tiro desde las afueras del área, pero el balón no alcanzó a caer lo suficiente como para incrustarse en la portería de Federico Vilar. Era el 81´ de tiempo corrido.
El Rebaño Sagrado no dejó de luchar por el gol que los metiera a la Final del futbol mexicano, pero finalmente el tiempo no fue el suficiente y desde ahora el balón tiene ya una deuda con los rojiblancos, esa llamada revancha que tarde o temprano llegará para las Chivas Rayadas del Guadalajara.
Giancarlo Maldonado al 3´ penetró en el área del Rebaño y con tiro cruzado abrió el marcador ante la alegría de la afición local y el desconcierto del Guadalajara, cuya anotación fue un auténtico balde de agua fría. Los Potros tomaron confianza y tomaban el balón, para de esa manera evitar que Chivas hiciera su futbol.
Conforme trascurrieron los minutos, los rojiblancos fueron equilibrando las acciones, hasta dominar al equipo dirigido por José Guadalupe Cruz y generar verdadero peligro sobre el marco defendido por un cada vez más exigido Federico Vilar.
Al 15` de acción, la ofensiva de Chivas despertó y Sergio Santana envió un servicio que fue rematado por Sergio Ávila que se fue apenas por encima de la portería atlantista. El Guadalajara ya estaba por superar al Atlante en el trámite del partido.
Ramón Morales a punto estuvo de marcar el empate, pero el balón pegó en el travesaño ante la mirada angustiosa de Vilar. Era el 21´ Chivas ya era mejor en el partido.
Corría el 39´ cuando un tiro libre cobrado por Sergio Ávila pasa en medio de un mar de piernas, incluidas las manos de Federico Vilar a quien se le escurre el esférico que termina en el fondo de la portería del Atlante, pero la anotación es invalidada por Armando Archundia, árbitro central del partido por fuera de lugar.
Pese a la adversidad, Chivas no bajó los brazos y para la segunda mitad del encuentro mantuvo el dominio con llegadas de Alberto Medina y Omar Bravo. Fue precisamente una jugada de Bravo dentro del área azulgrana la que pintó la duda en el trabajo de Archundia. El de Los Mochis fue jalado en el área por Omar Castillo, pero el silbante dejó seguir la jugada. El recuerdo del penal rojiblanco en el Jalisco, rondó el Andrés Quintana Roo en ese momento.
Atlante también tuvo sus opciones para ampliar el marcador, pero Luis Michel y la defensa de Chivas, estuvieron atentos ante los embates del Potro que pese a lo esporádico de sus arribos, no dejaron de traer peligro.
Xavier Báez, a punto estuvo de hacer la diferencia mediante un tiro desde las afueras del área, pero el balón no alcanzó a caer lo suficiente como para incrustarse en la portería de Federico Vilar. Era el 81´ de tiempo corrido.
El Rebaño Sagrado no dejó de luchar por el gol que los metiera a la Final del futbol mexicano, pero finalmente el tiempo no fue el suficiente y desde ahora el balón tiene ya una deuda con los rojiblancos, esa llamada revancha que tarde o temprano llegará para las Chivas Rayadas del Guadalajara.
FUENTE: http://www.chivascampeon.com/
