La migración de Mexicanos a nuestro País vecino, ha hecho que la Pasión Rojiblanca se expanda a EEUU, y es que desde el anuncio de que Houston albergaría uno de los partidos de Chivas en la SuperLiga 2008, la afición rojiblanca que habita en esta ciudad decidió hacer de la estancia del Rebaño en esta población tejana todo un acontencimiento.

Desde la llegada del Rebaño a tierras estadounidenses, cientos de aficionados merodearon las instalaciones del hotel de concentración del equipo en busca de estar cerca de sus ídolos, de convivir con ellos y de anticiparles que para el encuentro ante el Dynamo, el Estadio Robertson sería completamente rojiblanco.

Nuevamente se volvio a dar la "localia" del visitante en segundo encuentro de Chivas en esta SuperLiga, la afición cumplió lo prometido, ya que aunque este inmueble es casa de los Naranjas de la MLS, las camisetas del Rebaño predominaron por doquiera, las banderas rojiblancas fueron las más grandes y las más ondeantes y los gritos de "Chivas... Chivas..." fueron más poderosos y retumbaron dejando casi insonoros los "Go Dynamo Go".

Pero lo que más llamó la atención, fue el que la afición que abarrotó los tribunas del inmueble esperara paciente a las afueras del vestidor de Chivas para aplaudirle al equipo el triunfo obtenido, pues ubicados detrás de un cerco de seguridad colocado por la policía del estadio y de camino al autobús, cientos de fanáticos del Rebaño hicieron de la salida del equipo todo un ritual de despedida. Ya es costumbre que en cada sitio, cada ciudad, cada estadio donde aparecen las Chivas, haya mayoria de Chivas.

Chivas nuevamnete se dio cuenta de que, al igual que otros destinos del país, en Houston Chivas se siente como en su casa.

Chivas de Corazon

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