07 agosto 2010

   

El cuadro brasileño Internacional de Porto Alegre, se niega a jugar el próximo miércoles la final de "ida" de la Copa Libertadores de América, en el Estadio Omnilife ante el conjunto mexicano Chivas de Guadalajara.

Lo anterior, por que el inmueble del "Rebaño Sagrado", tiene cancha de pasto sintético, superficie que para los dirigentes del equipo amazónico no está dentro del reglamento del certamen continental.

"No está en el reglamento de la Libertadores y nosotros estamos acostumbrados a jugar en otro césped", señaló el vicepresidente del Inter, Fernando Carvalho.

Por lo pronto Guadalajara, tiene pactado jugar la final el 11 de agosto en su nuevo estadio, le agrade o no al Porto Alegre, sin embargo, de quejarse el Inter con la Conmebol, podría salirse con la suya de cambiar el escenario, debido a que los equipos mexicanos son invitados al torneo y siempre están expuestos a los cambios y reglas que quieran los equipos sudamericanos.

Mientras tanto la Conmebol, sin pronunciarse en torno al caso, designó al argentino Héctor Baldassi y el colombiano Óscar Ruiz dirigirán los partidos de la final de la Copa Libertadores entre el Chivas mexicano y el Internacional brasileño, anunció hoy la Conmebol.

Baldassi, ayudado por sus compatriotas Ricardo Casas y Hernán Maidana, tendrá a su cargo el encuentro de ida programado para el 11 de agosto en Guadalajara, a las 19:50 horas .

Por su parte, Ruiz, con la asistencia de los también colombianos Abraham González y Humberto Clavijo, dirigirá el choque de vuelta, que se disputará el 18 de agosto en Porto Alegre a las 22:00 hora local, según el informe de la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol).




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