• Una intensa y emocionante primera mitad fue la que desarrollaron ambos cuadros, que en pocos minutos brindaron las emociones suficientes
Con los dos dedos índices, Alberto Medina festejó su gol, como queriendo recordar que Guadalajara permanecería, una semana más, como segundo lugar general.

Chivas pudo hacer válida su hegemonía en su casa, venció a Rayados de Monterrey, equipo que parecía merecer más, pero que tuvo dos errores claves, en momentos determinantes del partido.

La diferencia la tuvieron en sus pies varios elementos, tanto para bien del Guadalajara, como para darle al traste a un empate que parecía bien merecido para Rayados, en base al empeño y empuje que mostró en la cancha del Estadio Omnilife.

Sin embargo, nadie contaba con el error de Darvin Chávez, al hacerse expulsar en un momento en que el encuentro parecía equilibrado, y cualquiera de los dos podría herir la cabaña rival.

Pero muchos tampoco contaban con la astucia de Alberto Medina, jugador que no se había encontrado con el gol en el presente torneo. De hecho, el “Venado” no se encontraba con el gol desde hace seis meses, cuando Chivas goleó a Pachuca en el mismo Estadio Omnilife.

Este dato basta y sobra para abrir un paréntesis en el camino del Guadalajara en su nueva casa, la cual debe desalojar por lo que resta del torneo, para abrir paso a los Juegos Panamericanos “Guadalajara 2011”.

Una intensa y emocionante primera mitad fue la que desarrollaron ambos cuadros, que en pocos minutos brindaron las emociones suficientes para convertir los goles que mantuvieran en vilo para la parte complementaria a la afición presente en el Estadio Omnilife.

A pesar de que las mejores opciones las generó el cuadro local desde el inicio, al tener en Omar Arellano un par de ocasiones para poner al frente a su equipo, Rayados mostró contundencia y certeza frente al arco rival.

Fue el equipo de Víctor Manuel Vucetich el que se puso al frente con la anotación de César “Chelito” Delgado”, quien anticipó en el remate luego del desborde de Nery Cardozo, quien por la derecha llegó hasta la raya de fondo, y tras meter un disparo deficiente, resultó pase para “Chelito”, quien se adelantó a la atajada de Luis Michel, para poner al frente a su equipo.

La capacidad de reacción de Guadalajara fue inmediata. Un minuto después, en un desborde por el lado izquierdo, Alberto Medina se metió al área, pero fue derribado por Sergio Pérez y Marco Rodríguez, árbitro del encuentro, no dudó en cobrar el penal.

La definición de Marco Fabián emparejó los cartones. El disparo al lado derecho fue casi atajado por Jonatan Orozco, pero con la suficiente potencia para marcar el tanto que emparejó los cartones.

En la parte complementaria todo parecía equilibrado, inclusive, Rayados comenzó los primeros minutos con un dominio territorial que puso nerviosos a los rojiblancos. Chivas no podía cruzar la mitad de la cancha con la pelota controlada.

Sin embargo, Darvin Chávez se equivocó en una jugada por el costado izquierdo, en una barrida inoportuna, al 59’.

A pesar de la inmediata reacción de Vucetich para evitar que su equipo se descompusiera, a Chivas le bastaron 19 minutos para definir la obra.

Al 78’, Alberto Medina aprovechó una salida anticipada de Jonatan Orozco para definir y poner el esférico pegado al primer palo, y sellar la victoria de Chivas.

Todavía en la última jugada del partido, Aldo de Nigris desperdició un remate, estando solo frente a Michel, mandando la pelota por encima. Esa jugada pudo cambiar el rumbo del partido.

Pero no le alcanzó a Rayados. Chivas impuso sus condiciones en su casa, la cual tendrá que esperar unos meses para volver a ver a Chivas conseguir los resultados que su afición tanto ha anhelado; en tanto, el invicto rojiblanco sigue vigente, y el romance también, ahora que volverán a la casa que muchos han añorado: el Estadio Jalisco.




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